El acto de elegir consumir alimentos, sustancias, fármacos, suplementos y otras sustancias de uso personal, implica como en todo derecho, la participación de los tres derechos fundamentales de los individuos: a la vida, a la libertad y a la propiedad. El acto de consumir sustancias está incluido dentro del derecho a la libertad personal, el acto de adquirir sustancias está previsto dentro del derecho a intercambiar propiedad, mientras que la búsqueda de bienestar personal es una facultad implícita dentro del derecho a la vida.
Desde luego, los individuos son los únicos responsables por todos los efectos benéficos o perjudiciales en su salud física y mental, o en sus finanzas, resultantes del consumo de alimentos y sustancias; en el caso de los menores de edad, son sus padres o apoderados legales quienes tienen derecho a limitar o regular el consumo de sustancias y alimentos.
Es loable el hecho de que muchos ciudadanos se preocupen por la salud y seguridad de sus semejantes y adviertan sobre el abuso de sustancias o alimentos, y es legítimo que estos ciudadanos se organicen voluntariamente para llevar a cabo campañas cívicas de advertencia y orientación sobre el abuso de sustancias, les asiste para ello el derecho a la libertad de expresión, prensa e información.
Por el contrario, es totalmente reprensible que los políticos violenten el derecho de los individuos a consumir sustancias mediante legislaciones, regulaciones y campañas costeadas con el dinero de otros. Peor aún, la legislación llevada hacia el extremo de crear “guerras contra las drogas” violenta los derechos fundamentales de muchos y ha creado mafias, las cuales a su vez perpetran atrocidades para asegurarse por la violencia el cumplimiento de acuerdos que por la ilegalización estatal no pueden llegar a las cortes y a mecanismos pacíficos de resolución de controversias.
El Movimiento Libertario del Ecuador respeta el derecho de las personas a consumir los alimentos, sustancias y fármacos, y recuerda que son de responsabilidad personal los efectos beneficiosos y adversos derivados del consumo de sustancias. El Movimiento Libertario del Ecuador no promueve el consumo o legalización de sustancia alguna, sí exige en cambio la despenalización y desregulación del consumo; y de igual manera, condena las guerras contra las drogas que han costado innumerables vidas y la libertad de muchos, que se han constituido en despilfarro de enormes recursos financieros de los ciudadanos, y sólo ha incentivado la violencia y arbitrariedad.
