CARTA ABIERTA AL FUTURO PRESIDENTE DEL ECUADOR
Queremos creer que sea quien fuere que se alce con la victoria en la
segunda vuelta, tenga oidos para propuestas largamente pensadas y
meditadas por la nueva generación de jóvenes pro empresa del Ecuador,
pues han funcionado muy bien en otros paises de similares
características al nuestro, y por el bienestar de las familias
ecuatorianas, es mejor adaptarlas que tratar de inventar el agua tibia o
llevarnos por rumbos estatistas, de nacionalismo mal entendido o de
autoritarismo, que han sido precisamente lo que ya hemos tenido en
nuestro país los últimos 70 años con visibles resultados.
Consideramos, por tanto, que el proximo presidente puede eventualmente
traer una época de progreso, si tiene la voluntad de enrumbarnos por el
sendero de la libertad y el respeto a los derechos individuales. Por
ello, le proponemos la implementación de estas políticas, que son
consistentemente opuestas al paternalismo que nos mantiene lejos del
Ecuador que merecemos.
1) Una moneda confiable, que permita a las familias ecuatorianas
planificar, ahorrar e invertir. En las actuales circunstancias esto sólo
puede significar el mantenimiento del dólar como la moneda de curso
legal en el país.
2) Retornar a un respeto del derecho humano a disponer del propio
talento y su fruto, la propiedad, en tratos libres con otras personas.
Apertura unilateral y mediante tratados al libre comercio con todos los
pueblos del mundo, para que los ecuatorianos puedan optar por los
mejores y más baratos productos. Al mismo tiempo, la economía se vuelve
más eficiente y competitiva incrementando el número de empresas, y por
ende, las fuentes de trabajo productivas.
3) La realización de un verdadero estado de derecho, base ética de toda
sociedad y escenario indispensable para el trabajo y el crecimiento. Es
imprescindible honrar los compromisos adquiridos entre ecuatorianos
-los contratos- y entre países –convenios internacionales y similares.
4) Devolver a la sociedad los servicios y los recursos naturales
secuestrados por las mafias sindicales y empresas monopolistas. Esto
implica abrir a competencia el manejo de las mal llamadas áreas
estratégicas, para que los servicios públicos prosperen. Así, se reducen
los costos y mejora significativamente el trato a los usuarios.
Eliminar los contratos colectivos y flexibilizar el Código de Trabajo.
Libertad de elegir para que los trabajadores y empleados puedan optar
por una combinación privada de servicios de salud y ahorro para la vejez
como ya ocurre en Colombia.
Propiedad privada, empresarial o comunitaria del subsuelo.
En especial, la devolución a los afiliados al sistema de seguridad
social, del control de sus ahorros previsionales, para que luego de un
periodo de transición y reajuste de 2 años promedio, puedan escoger
entre una amplia gama de opciones de planes de salud y jubilación.
5) Especial atención merecerá la educación pública, actualmente
monopolizada por un grupo extremista. Las partidas para educación
deberán ser asignadas directamente a los estudiantes a través de bonos
intransferibles, entregados a los padres, redimibles exclusivamente en
instituciones educativas. La provisión del servicio debe pasar a manos
de los municipios, juntas parroquiales o comités de padres de familia.
Deberá eliminarse las regulaciones y trabas de la educación privada.
6) Una reforma constitucional para sustraer definitivamente de la
influencia partidista a la Corte Suprema de Justicia, al Tribunal
Constitucional, al Tribunal Supremo Electoral y, en general, a toda la
función jurisdiccional sin que esto implique soluciones fascistas que
constituyan a determinados gremios y asociaciones en dueños de la
justicia ecuatoriana.
7) Se debe profundizar las Institucionalidad Republicana mediante un
sistema electoral en que los funcionarios sean escogidos en votaciones
uninominales por distritos; el voto voluntario; y el servicio militar
optativo.
7) Una política exterior soberana y verdaderamente no alineada, fijada
en función de los intereses de Ecuador y no en hipotéticas solidaridades
de “bloque”. Condenar a toda forma de terrorismo, sin ninguna
consideración a los propósitos que persigan los perpetradores de ese
delito. Todos los agitadores y agentes extranjeros deben ser expulsados
del país.
8) La sociedad debe retomar su autoridad y su legítimo poder para
proteger la vida y la propiedad de los ciudadanos, que ese es el fin
esencial para el que se han creado los Estados. Leyes severas,
tribunales honestos, una fuerza pública eficiente y un sistema
penitenciario humano pero seguro, deben ser prioridades.
9) Si algo nos separa irremediablemente de ciertas tendencias es la
posibilidad de que, llegadas al gobierno, atenten contra la libertad de
expresión y prensa. Por una parte, tenemos su cercanía ideológica con
los regímenes de Cuba y Venezuela que han conculcado estos derechos sin
los cuales no existe democracia, y por otro lado, está la expresa
declaración de que se crearán tribunales especiales para juzgar las
faltas relacionadas con estas libertades. Las actuaciones de los
periodistas y ciudadanos que expresen sus opiniones públicamente han de
ventilarse por la justicia ordinaria, sin intervención ni presiones por
parte del poder político.
10) Pensamos que la institución de la Primera Dama no tiene por qué
significar machismo para el próximo período, si no que por el contrario,
amalgama el donaire y elegancia que tiene la mujer con su capacidad de
ser una ejecutora del rol subsidiario del Estado que es parte de la
Economía Social de Mercado que nuestra Constitución declara. Por eso
celebramos la existencia de ese rol, que simboliza además la unidad
familiar ante los grandes desafíos nacionales.
Señor
presidente, tiene entonces la oportunidad y la responsabilidad de
aplicar estas reformas, sin las cuales no será posible que el país
alcance siquiera niveles medianos de bienestar y calidad de vida. Por
eso, si usted emprende políticas que demuestren esta orientación,
contará con el decidido apoyo de la corriente liberal ecuatoriana.
De lo contrario, sin que haya necesidad de que contribuyamos a ello, la
historia lo incluirá en la, por desgracia, demasiado larga lista de
gobernantes fallidos.
Movimiento Libertario
Jóvenes por un Ecuador libre y próspero
Jóvenes por un Ecuador libre y próspero