Derecho a comerciar libremente

El comercio consiste en el intercambio voluntario de propiedad entre individuos, este intercambio sólo es posible cuando las partes actuantes acceden de libre acuerdo. Bajo este criterio de intercambio voluntario de bienes legítimos, el comercio debe ser libre de interferencia arbitraria de terceros, libre de regulaciones e impuestos, porque violentar la condición libre del comercio es atentar contra derechos fundamentales de los individuos.

Las barreras al comercio libre tienen su origen en los privilegios indebidos que algunos reyes otorgaban a ciertos señores feudales para “proteger” sus negocios, actualmente se esgrime, con apenas diferencia de términos, que las barreras al comercio a través de aranceles y normas busca “proteger” a la industria nacional y los empleos que esta mantiene. Este proteccionismo es contrario a la ética pues crea grupos de privilegiados en detrimento de los consumidores violentando el principio de igualdad ante la ley y además crea severas distorsiones económicas que producen pobreza y atraso.

Los supuestos fines del proteccionismo tampoco se cumplen; la acción de “proteger” a un sector de la industria con aranceles y reglamentos impide que ésta se temple y perfeccione en sana competencia, los empleos tampoco se especializan debido a la falta competitividad, los salarios se estancan por falta de especialización, los productos se vuelven de baja calidad por falta de innovación, sólo crecen las ganancias mercantilistas en un primer momento, para luego decaer mientras todo un sector deriva hacia la decrepitud.

El Movimiento Libertario del Ecuador promueve el libre comercio, apoya toda eliminación de aranceles y abolición de barreras no arancelarias. El Movimiento Libertario del Ecuador apoya los tratados de libre comercio que realmente liberen el flujo de bienes y servicios, y apoya la apertura unilateral del comercio, el cual permite a los consumidores elegir, a los empresarios honestos competir y a todos disfrutar de una mejor calidad de vida y sobretodo de libertad.

La libertad de Movimiento

Haciendo uso de su libertad personal los individuos tienen derecho a desplazarse libremente, entrar y salir del país y fijar su residencia sin más límites que los de las propiedades de otros, la restricción de este derecho puede ejercerse sólo contra quienes hayan cometido delitos y por el tiempo señalado en el veredicto.

Ninguna persona debe ser obligada a salir de su propiedad incluso en el caso de evacuación de emergencia pues le asiste al propietario el derecho a permanecer en su residencia bajo su propia responsabilidad y riesgo. Tampoco puede obligarse a una persona a permanecer dentro de su propiedad sin una razón justificada, tales justificaciones pueden ser de fuerza mayor como los desastres naturales, conflicto armado o epidemia; sin embargo, los toques de queda por ser controversiales deben ser objeto de escrutinio legal antes, durante y después de su decreto pues suponen la potencial violación de un derecho, un toque de queda injustificado o justificado por razones políticas debe ser sancionado.

Los vecinos de un territorio tienen derecho a organizarse y apropiarse del espacio público de uso común entre los vecinos para establecer servicios públicos en aras de mejorar su calidad de vida. Tal espacio común puede ser regulado por la comunidad estableciendo límites a su ingreso y uso, tal prerrogativa no constituye una erosión del derecho al libre tránsito siempre que los límites establecidos y los servicios autogestionados por el vecindario no violenten los derechos de los integrantes del mismo o de terceros.

La migración constituye también un legítimo derecho tanto para salir como para entrar al país; siendo fundamentales y universales, los derechos amparan a todos, tanto al ciudadano local como al extranjero. Personas, bienes, capitales e ideas deben tener libre ingreso y salida de ciudades, países y territorios, sin impuestos de salida o entrada ni regulaciones que obstaculicen el libre tránsito.

El Movimiento Libertario del Ecuador reconoce el derecho fundamental a movilizarse por el territorio con el límite natural de la propiedad de otros sea individual o comunitaria, y exige la abolición de las leyes que impiden el libre tránsito o que regulan arbitrariamente el derecho a la protesta pacífica en el espacio público. El Movimiento Libertario del Ecuador promueve el libre movimiento de personas, bienes, capitales e ideas como un derecho fundamental de los individuos a trasladarse a sí mismos y sus pertenencias sin limitación, derecho que ejercido crea riqueza cultural y económica pues una sociedad de libre intercambio y movimiento se nutre gracias a las ideas y bienes adquiridos y las experiencias compartidas.

Sobre la expresión cultural

Las costumbres, lenguajes, símbolos, creencias, artes y oficios, etc. son instituciones que han evolucionado en las sociedades por aportaciones de los individuos y como tales, son estos quienes tienen derecho a expresarlos individual o colectivamente en forma voluntaria, tales manifestaciones culturales no son apropiables y sólo los objetos tangibles creados por los individuos son apropiables por sus creadores.

Todas las personas tienen derecho a expresarse culturalmente y a ejercer sus costumbres siempre que estas no violen los derechos de otros. También los menores de edad tienen derecho a adoptar prácticas culturales pacíficas; sin embargo los padres o apoderados legales tienen derecho a limitar ciertas prácticas cuya ejecución pongan en riesgo la integridad física o bienes propios o de terceros, sobre estas u otras prácticas controversiales los padres o apoderados y los menores deben agotar los mecanismos de diálogo a fin de lograr acuerdo entre ambas partes.

En cuanto a los derechos sobre los bienes culturales materiales estos sólo serán detentados por quienes los crearon, descubrieron u obtenido a través de medios legítimos como el comercio, la herencia o la donación. La interferencia del gobierno sobre la expresión cultural es censura y un atropello a la igualdad ante la ley al privilegiar ciertas expresiones prácticas culturales sobre otras. La apropiación o regulación del gobierno sobre bienes culturales materiales es confiscación y es condenable e injustificable como todo expolio contra los individuos.

La regulación y protección estatal contra la copia o transmisión de producciones culturales intangibles es una práctica mercantilista que aunque arraigada y extendida no tiene una base ética, la información o ideas que se hacen públicas no tienen dueño: no son propiedad, por ende la apropiación de ideas expresadas en diversa forma, entre ellas costumbres, técnicas artísticas o de manufactura, argumentos de la literatura, fórmulas y recetas para crear sustancias, etc. no constituyen propiedad ni por ende sujetas a regulación. Los contratos establecidos entre los individuos para proteger ideas en forma excluyente sólo vinculan a las partes contractuales pero no vulneran el derecho a expresar tales ideas halladas independientemente por terceros.

El Movimiento Libertario del Ecuador promueve la libre expresión cultural y la protección de la propiedad cultural entendida como bienes culturales materiales creados por los individuos, considera además que las ideas no son apropiables ni sujetas por ello a protección legal, al contrario apoya el libre intercambio de ideas, apoya los acuerdos en aras de defender las ideas creadas bajo un vínculo contractual, sin perjuicio de los derechos a expresar dichas ideas obtenidas independiente por terceros de forma legítima.

Derecho a elegir educación

La educación es una necesidad básica para el desarrollo de cada individuo, y al igual que otros servicios, elegir el tipo de educación es una facultad que reside en cada individuo y en los padres o apoderados legales en el caso de los menores de edad. Es por ello que la educación no debe ser regulada o suministrada por el gobierno, y por el contrario los servicios educativos deben ser devueltos a la sociedad civil, y su elección a los individuos.

Los individuos tienen derecho a elegir la educación para sí y para sus hijos de acuerdo a sus necesidades, cultura, objetivos y estilo de vida; por ende, la regulación estatal de contenidos, modalidades, horarios, costos y otros aspectos de los servicios educativos constituyen sistemas arbitrarios, injustos, caros y deficientes, en particular la imposición estatal de contenidos, materias impartidas y textos constituyen además censura. La atribución que se ha dado al Estado para impartir educación a través de establecimientos públicos, pese a las supuestas buenas intenciones de ello, ha creado un sistema de adoctrinamiento masivo y obligatorio que no forma individuos íntegros y responsables sino súbditos conformistas e indolentes. Los daños y perjuicios de un sistema educativo semejante se sienten durante generaciones y su costo es incalculable; estos perjuicios son evidentes en la mala calidad de los funcionarios electos y las leyes promulgadas, en los costos sanitarios, en el cotidiano irrespeto al individuo, en la corrupción rampante, y en el estancamiento económico, tecnológico y cultural.

El Movimiento Libertario del Ecuador promueve la libre elección de la educación y la libertad para crear establecimientos educativos porque considera que lo más preciado de la sociedad, los niños y adolescentes y su formación, no deben abandonarse a manos de políticos, burócratas y sindicalistas. En consecuencia, promueve la entrega de los servicios educativos a las organizaciones de la sociedad civil: familias, educadores particulares, fundaciones privadas, empresas, juntas de padres de familia, asociaciones de profesionales, agrupaciones religiosas y caritativas, etc. El Movimiento Libertario del Ecuador reconoce que la regulación de horarios y costos, conocimientos y prácticas impartidas, textos e instalaciones, elección de maestros, y todo otro aspecto de la educación, concierne únicamente a los propietarios de los establecimientos educativos en cooperación con los padres de familia de los estudiantes.

El Movimiento Libertario del Ecuador cree indispensable la libertad educativa en cuanto a conocimientos y prácticas, incluida la libertad de establecer escuelas de educación laica como religiosa, a establecer escuelas especializadas en ramas técnicas, comerciales, deportivas, artísticas, científicas. Deben ser los ciudadanos quienes deben elegir el tipo de educación que se ajusta a su cultura, costumbres, intereses, objetivos y estilo de vida. La libertad de elección en materia educativa significará la evolución de un sistema civilizado de mejora creciente cuyos resultados serán evidentes en forma de personas mejor preparadas, más responsables e involucradas en su desarrollo personal y en conjunto en el desarrollo económico, técnico y cultural de la sociedad.

Sobre la libre asociación

Los individuos haciendo uso de su libertad tienen derecho a asociarse voluntariamente con otros individuos para establecer vínculos de diversa índole para llevar a cabo actividades pacíficas, por ende no deben existir regulaciones estatales sobre qué tipo de asociaciones pueden formar los individuos, sobre quienes pueden formar asociaciones, sobre las normas internas de las asociaciones o sobre qué tareas pueden realizar estas. Por otra parte, la ideología y normas de las asociaciones no debe convertirse en base de la legislación, y tampoco los individuos deben estar obligados a asociarse o impedidos de abandonar las organizaciones de las que formen parte.

La pertenencia a una organización determinada no debe ser obligatoria para el ejercicio laboral, profesional, empresarial, cultural, académico o de cualquier tipo, pues esta obligación constituye coacción. Las propuestas y normas de las asociaciones no deben convertirse en obligatorias para quienes no son parte de la asociación pero pueden ser tomadas como referencia, la obligatoriedad de normas privadas a través de legislación estatal también constituyen coacción. Es legítima la negociación entre una asociación de trabajadores y quienes los han contratado pero no deben considerarse como mecanismo de negociación los actos de fuerza o la amenaza de su uso, tampoco los trabajadores deben ser forzados a pertenecer a una asociación o forzados a aceptar sus normas y acuerdos. Debe abolirse toda legislación que de tratamiento especial a las organizaciones o a quienes las formen, o que den tratamiento especial a grupos incluso si no están organizados, también deben abolirse las leyes y regulaciones que requieran aprobación o agremiación para ejercer trabajo, profesión o actividad de cualquier tipo o para poseer propiedad de cualquier tipo.

El Movimiento Libertario del Ecuador reconoce la libertad de los individuos a asociarse en todas las diversas formas en que les sean posibles, tales asociaciones si son voluntarias y orientadas a realizar actividades pacíficas, son el resultado de la cooperación civilizada. El Movimiento Libertario del Ecuador también reconoce que las asociaciones deben tener los mismos límites que tienen los individuos; es decir, no pueden ejecutar actos violentos, amenazar con iniciar el uso de la fuerza o cometer fraude. Tampoco las organizaciones pueden establecer coacción contra otros individuos u organizaciones creando legislación a partir de sus normas e ideas, en complicidad con políticos y burócratas.

Sobre la libertad de prensa

El derecho a la libertad de prensa deriva directamente de la libertad personal y al igual que el derecho a la libre expresión, tiene como límites no incurrir en fraude, coerción, amenazas e intrusión; la difamación también debe impedirse siempre que pueda determinarse sin duda que una opinión fue expresada con conocimiento de su falsedad y buscando causar daño al posible difamado.

Debe aclararse primero que  la descripción de un evento, el relato de un hecho, la selección de fuentes y hechos para una investigación, la redacción de cualquier texto, está influido consciente o inconscientemente por la opinión personal, los afectos filosóficos, la formación moral, las preferencias o prejuicios del autor; es difícil encontrar un texto “imparcial” ya sea en tono, contenido, punto de vista o fuentes elegidos por el autor, con excepción quizá de los textos que versan sobre ciencias exactas. Por ello, las legislaciones que exigen objetividad, imparcialidad, verificación y contraste de hechos y fuentes, piden un imposible y en realidad buscan permitir la censura de individuos y medios.

También son formas de censura indirecta la obligatoriedad de tener un determinado título profesional para ejercer el periodismo, la creación de propaganda estatal y de medios de comunicación públicos, la imposición de cadenas en medios masivos sobre asuntos que no sean de emergencia nacional, la regulación o restricción de información pública, entre otros.

El Movimiento Libertario del Ecuador manifiesta que la libertad de prensa debe ejercerse, protegerse y promoverse activamente, porque no sólo es una libertad que ejercen los profesionales de la comunicación sino la libertad de todos a elegir información de los medios. Deben abolirse las legislaciones que intentar definir en qué consiste la información “veraz”, “verificada”, “contrastada” o similares, y de igual manera debe abolirse toda legislación que regule el funcionamiento de los medios de comunicación. Debe prohibirse la propaganda de todo ente estatal, y al contrario, debe desclasificarse la información pública y desregularse el acceso a esta.

Sobre la libertad de expresión

La libertad de expresión deriva a su vez del derecho fundamental a la libertad personal. La única limitación de este derecho se encuentra en la libertad de otros; esta limitación incluye actividades delictivas como el fraude, la coerción, la amenaza de iniciar una agresión contra los derechos de otros o la invasión de propiedad para expresar un punto de vista.

Los políticos han buscado legitimar la censura por razones presuntamente moralistas para que el gobierno instaure horarios de programación televisiva, censure películas, prohíba publicar libros o regule contenidos en medios electrónicos. Todo lo anterior constituye deplorable censura y es, por mucho, más inmoral que cualquier contenido controversial pues implica utilización de la fuerza y la coerción legal para conducir las elecciones de las personas. La discriminación de contenidos y los horarios en los cuales son obtenidos son facultad y derecho de cada individuo, en el caso de los niños menores son los padres o apoderados legales los únicos responsables y con derecho a discriminar contenidos y horarios que reciben los menores.

Los límites a la libertad de expresión sólo deben aplicarse a las expresiones que signifiquen fraude, como el uso de medios electrónicos para obtener datos personales y cometer un robo; coerción, como la amenaza contra la integridad física si no se realiza una acción o un pago; amenaza, como la advertencia de violar derechos fundamentales; intrusión, como ingresar por la fuerza o sin permiso a un establecimiento y transmitir información. Un caso especial constituye la difamación donde se atribuye a otro la perpetración de un crimen que no ha cometido, a sabiendas de la inocencia de este y con el ánimo de provocar una afectación a los derechos fundamentales del difamado. En estos casos debe exigirse especial cuidado en el debido proceso legal y deben realizarse multitud de exámenes legales para evitar lesionar el derecho a la libre expresión y al mismo tiempo impedir la afectación a los derechos del posible difamado.

Sobre lo que los individuos y sus medios puedan expresar o recibir información no debe ser regulado o impedido por el gobierno, pues es facultad personal discriminar la información que se recibe de los medios. El Movimiento Libertario del Ecuador promueve la libertad de expresión de todos los individuos sin más límites que los antes descritos como fraude, coerción, amenazas, intrusión, y difamación dónde pueda demostrarse real malicia.

Las convicciones religiosas y filosóficas

Desde que el hombre evolucionó su consciencia y buscó el significado de su existencia ha ideado posibles explicaciones sobre las leyes de la naturaleza, tales pensamientos originaron innumerables compendios filosóficos que identificaron deidades a las cuales se les ha rendido culto, formando religiones y sectas. Sobre cuál escuela teológica o filosófica explica mejor la naturaleza y leyes del universo es un debate inacabado y permanecerá así por mucho tiempo.

De todo el conjunto de filosofías religiosas que existen cada individuo tiene el derecho a adherirse a la filosofía, religión, culto o secta con las que se identifique y a practicar los rituales que sus creencias señalen, tiene derecho a cambiar de opinión o elegir no adherirse a ninguna escuela de pensamiento. Las creencias y rituales de las distintas religiones y filosofías tienen una sola limitación: la de no violentar los derechos fundamentales de terceros.

El Movimiento Libertario del Ecuador, el cuál tradicionalmente se ha compuesto por personas que siguen distintas creencias religiosas y corrientes filosóficas, respeta todas las corrientes de pensamiento, y respeta las prácticas religiosas que no violenten la vida, integridad, libertad y propiedad de otros. El Movimiento Libertario del Ecuador se opone a toda legislación basada en creencias o prejuicios religiosos pues ésta es contraria con el principio de igualdad ante la ley y a la libertad de culto. El movimiento Libertario del Ecuador reconoce y promueve el derecho de los individuos a formar comunidades religiosas y fundar templos, escuelas, institutos, empresas y otros establecimientos en los cuales puedan establecer normas, enseñanzas y costumbres pacíficas y basadas en sus convicciones.

La libertad para consumir sustancias

El acto de elegir consumir alimentos, sustancias, fármacos, suplementos y otras sustancias de uso personal, implica como en todo derecho, la participación de los tres derechos fundamentales de los individuos: a la vida, a la libertad y a la propiedad. El acto de consumir sustancias está incluido dentro del derecho a la libertad personal, el acto de adquirir sustancias está previsto dentro del derecho a intercambiar propiedad, mientras que la búsqueda de bienestar personal es una facultad implícita dentro del derecho a la vida.

Desde luego, los individuos son los únicos responsables por todos los efectos benéficos o perjudiciales en su salud física y mental, o en sus finanzas, resultantes del consumo de alimentos y sustancias; en el caso de los menores de edad, son sus padres o apoderados legales quienes tienen derecho a limitar o regular el consumo de sustancias y alimentos.

Es loable el hecho de que muchos ciudadanos se preocupen por la salud y seguridad de sus semejantes y adviertan sobre el abuso de sustancias o alimentos, y es legítimo que estos ciudadanos se organicen voluntariamente para llevar a cabo campañas cívicas de advertencia y orientación sobre el abuso de sustancias, les asiste para ello el derecho a la libertad de expresión, prensa e información.

Por el contrario, es totalmente reprensible que los políticos violenten el derecho de los individuos a consumir sustancias mediante legislaciones, regulaciones y campañas costeadas con el dinero de otros. Peor aún, la legislación llevada hacia el extremo de crear “guerras contra las drogas” violenta los derechos fundamentales de muchos y ha creado mafias, las cuales a su vez perpetran atrocidades para asegurarse por la violencia el cumplimiento de acuerdos que por la ilegalización estatal no pueden llegar a las cortes y a mecanismos pacíficos de resolución de controversias.

El Movimiento Libertario del Ecuador respeta el derecho de las personas a consumir los alimentos, sustancias y fármacos, y recuerda que son de responsabilidad personal los efectos beneficiosos y adversos derivados del consumo de sustancias. El Movimiento Libertario del Ecuador no promueve el consumo o legalización de sustancia alguna, sí exige en cambio la despenalización y desregulación del consumo; y de igual manera, condena las guerras contra las drogas que han costado innumerables vidas y la libertad de muchos, que se han constituido en despilfarro de enormes recursos financieros de los ciudadanos, y sólo ha incentivado la violencia y arbitrariedad.

Sobre la unión conyugal

Como parte de su derecho fundamental a la libertad, los individuos tienen derecho a unirse voluntariamente para establecer un vínculo conyugal, con personas del sexo opuesto o del mismo sexo. Lo que los individuos en forma voluntaria acuerden en cuanto a unión conyugal, o de cualquier tipo siempre que tenga fines pacíficos, sólo concierne a los suscritos a tales acuerdos conyugales.

Los asuntos que suelen corresponder a  una unión conyugal como crianza de hijos, régimen de separación o conjunto de bienes, beneficiarios de seguros y herencias, también corresponden a las parejas del mismo sexo que formen una unión.

En cuanto a la adopción de menores, los asuntos y arreglos en esta materia serán concernientes únicamente a las partes involucradas en tales acuerdos; los padres o representantes legales del menor y quienes deseen adoptar, siempre que los fines no supongan una violación de los derechos fundamentales del menor.

El Movimiento Libertario del Ecuador, promoverá siempre los acuerdos voluntarios con fines pacíficos, incluido el matrimonio o unión conyugal entre personas de sexo opuesto o del mismo sexo. Así mismo rechaza toda intervención del gobierno a legislar sobre esta materia, debido a que estos asuntos son de carácter privado y personal mientras sean fruto de acuerdos libres.

La propiedad privada

El derecho a la vida y el derecho a la libertad son en realidad indivisibles del derecho de propiedad, donde la vida es la propiedad sobre uno mismo o auto-propiedad y la libertad es la capacidad de disponer del cuerpo y su acción. Los bienes materiales creados o adquiridos pacíficamente son el resultado de haber dispuesto racionalmente el uso del propio cuerpo para libremente crear tales bienes. Por ende, el respeto a la propiedad equivale a respetar al propietario. Despojar a un individuo de su propiedad sólo es posible mediante un acto de agresión, de amenaza de agresión o mediante el fraude o violación de un contrato. Tales acciones son condenables y no tienen justificación.

Toda persona tiene derecho a crear, adquirir y disponer de propiedad, también tiene derecho a establecer normas y reglamentos propios sobre el acceso, uso y goce de su propiedad, y a establecer el precio sobre su propiedad a su criterio.

La propiedad siendo un derecho fundamental del individuo no obedece a un “fin social” ni es una concesión “tolerada” por quien o quienes ejercen el poder, ninguna justificación puede servir de base para el despojo de propiedad, solamente quien haya ocasionado un perjuicio a otra persona o le haya arrebatado su propiedad debe reparar el perjuicio con su propiedad o trabajo.

El Movimiento Libertario del Ecuador, reconoce el derecho a la propiedad privada y promueve su respeto, su adquisición por medios pacíficos, el libre intercambio de propiedad, el respeto a las facultades d cada propietario a establecer normas sobre su propiedad. Rechaza en cambio la invasión de la propiedad; rechaza el despojo de propiedad a través confiscación, embargo, incautación, decomiso, embargo u otras formas de abuso que cometen los gobiernos contra los individuos; rechaza también la erosión que hacen los gobiernos del derecho a la propiedad privada mediante impuestos, regulaciones y controles diversos.

Derecho a la Libertad

Junto a los derechos a la vida y a la propiedad, la libertad es un derecho fundamental, es el derecho que deriva de disponer de la propiedad sobre el propio cuerpo, bajo este derecho se amparan todos los derechos de consciencia, culto, expresión, circulación, asociación, unión conyugal, expresión cultural, empresa, contratación, comercio o consumo. Este derecho sólo tiene como obligación el respeto a la libertad de otros.

Si bien es natural que los padres deban precautelar la integridad de sus hijos limitando ciertos derechos, eventualmente los niños adquirirán madurez e independencia y ejercerán su plena libertad como adultos; exceptuando esta realidad natural, la libertad personal debe ser respetada en todas sus formas y para todos los individuos; no existe justificación para limitar este derecho, ni por razones de necesidad ni por prerrogativas de individuos, grupos o gobiernos.

Los individuos no siempre estarán de acuerdo con las acciones, costumbres, expresiones, ideas, filosofía o fines de otros, y no es necesario que se encuentren de acuerdo, sin embargo sí es necesario y obligatorio respetar el ejercicio de las libertades de los demás. La paz, la cooperación, la tolerancia, la solidaridad son posibles cuando personas con gustos variados reconocen y respetan la diversidad de estilos de vida de otros y encuentran puntos comunes de entendimiento para realizar diversos o limitados fines.

El Movimiento Libertario del Ecuador, cuya filosofía se basa en el respeto a los derechos individuales, promueve el ejercicio de la libertad personal en los diversos ámbitos donde esta puede expresarse. El Movimiento Libertario del Ecuador defiende la libertad religiosa y de conciencia, la libertad de expresión y prensa, la libertad a formar unión conyugal o libre y formar familia, la libertad a la libre asociación y contratación, la libertad a expresarse culturalmente, la libertad de movimiento, la libertad de ejercer profesión y empresa, la libertad de comercio y consumo, la libertad de formar fortuna y a desplazarla libremente.

La vida y la integridad

La vida es el derecho base para el ejercicio de todo otro derecho posterior, pues la libertad sólo puede ejercerse con la vida y la propiedad sólo puede lograrse disponiendo del esfuerzo racional bajo libertad. La vida de cada individuo en sí es preciosa, su respeto es una obligación para todos mientras que el arrebato o el atropello de esta son condenables. Sólo el individuo tiene potestad para disponer de su propia vida.

Cada individuo busca naturalmente mantener su vida, en cada vez mejor calidad de ser posible, su única obligación es la de respetar la vida de otros. Un individuo sólo tiene derecho a usar la fuerza en legítima defensa si es agredido físicamente y si no hubiese otra forma de evitar la lucha física. La integridad de la vida debe ser respetada cabalmente, todo trato degradante o cruel debe ser condenado y sancionado.

El Movimiento Libertario del Ecuador, reconoce el derecho a la vida y a la integridad física y se compromete a promover su respeto y a condenar activamente la pena de muerte, la guerra, la tortura y tratos degradantes, así como las regulaciones, burocracias, impuestos y controles diversos cuya ejecución obstaculiza la legítima búsqueda de calidad de vida.

Sobre la soberanía individual

La verdadera soberanía es aquella que pertenece al individuo, que reconoce el valor y dignidad del ser humano como individuo, ser soberano significa que toda persona es dueña de sí misma por derecho natural y por ende tiene control total sobre su cuerpo y sobre su vida. No puede existir ninguna noción real de derecho sin el reconocimiento de la soberanía individual.

Reconocer la soberanía del individuo es la condición necesaria para reconocer la existencia de los derechos naturales del hombre a la vida e integridad física, a la libertad para disponer de su vida y a la propiedad obtenida por su esfuerzo. Todos los demás derechos derivado de los anteriores, desde el derecho a la libre expresión o la libertad para comerciar, tienen como raíz la soberanía individual.

Realmente puede exigirse a cada individuo una sola cosa: respeto a la soberanía de sus semejantes. Cuando los individuos se reconocen implícitamente como soberanos a otros individuos, se vuelven posibles la cooperación, el desarrollo y la paz; y si este reconocimiento se vuelve continuado en el tiempo nacen las instituciones como el derecho, la moral, los contratos, el comercio y todo aspecto virtuoso y deseable para una convivencia pacífica en una sociedad.

El Movimiento Libertario del Ecuador, promueve el reconocimiento y valoración de la soberanía individual, raíz y principio de todo derecho fundamental, base necesaria para la cooperación libre de los individuos para buscar su progreso personal y por consecuencia colectivo.

El Verdadero Liberalismo

El Movimiento Libertario de Ecuador y el Instituto Ludwig Von Mises de Ecuador han recopilado en cerca de 100 paginas una introducción al liberalismo. Con este documento pretendemos dar una guía de inicio a todos aquellos que tengan curiosidad para definir su postura política. El liberalismo como los liberales lo entendemos no es esa malvada ideología cuyo fin es hacer más ricos a los ricos y más pobres a los pobres.